El Pacto de Mayo firmado entre el gobierno nacional y la mayoría de los gobernadores de Argentina establece, entre sus principales objetivos, que el peso relativo del gasto público en la economía debe ser del 25% del PBI.
Luego de un ajuste significativo del gasto durante el año 2024, el peso relativo del gasto consolidado argentino habría terminado en 33,5% del PBI. En relación al 40,7% del PBI del año 2023, significaría una baja de 7,2 puntos porcentuales del PBI en solamente un año. Para llegar al 25% planteado como objetivo, resta una reducción adicional de 8,5 puntos porcentuales del PBI.
Dado este contexto y el objetivo trazado, resulta interesante analizar la situación particular de una provincia como Córdoba, identificando su situación relativa con el país.
En el gráfico se presentan los resultados obtenidos. La primera cuestión que surge es que el peso relativo del gasto público en Córdoba habría sido del 28,1% del PBG durante el año 2024, marcando en este sentido que está cerca del objetivo del 25% del PBI del Pacto de Mayo. Es más bajo que el peso relativo del gasto consolidado del país que, como se describió más arriba, habría sido del 33,5% del PBI en el año 2024.
En relación a la estructura del gasto en Córdoba, el 46% estaría explicado por el gasto nacional (12,8% del PBG), otro 42% por el gasto provincial (11,7% del PBG) y el 12% restante por el gasto municipal (3,6% del PBI). En el país, las participaciones son: Nación 53%, Provincias 39% y municipios 8%.
Otro punto de interés es el análisis de la reducción del peso del gasto público de Córdoba en 2024 respecto a 2023. En efecto, pasó del 35,9% del PBI en 2023 al 28,1% del PBI en 2024, registrando una caída de 7,8 puntos porcentuales del PBI. El 47% de la caída es explicada por la reducción del gasto nacional en Córdoba, el 40% por la reducción del gasto provincial y el 13% restante por la reducción del gasto municipal. Este comportamiento determinó una reducción superior del peso del gasto en Córdoba (7,8 puntos porcentuales del PBG) que del peso del gasto consolidado argentino (7,2 puntos porcentuales del PBI).
El desafío que implica que todas las jurisdicciones lleguen a un peso relativo del gasto público del 25% del PBI es muy complejo, dado que no todas las jurisdicciones tienen una situación similar. Si el gasto consolidado argentino tiene ahora una participación en el PBI del 33,5% y el gasto público en Córdoba una del 28%, significa que hay jurisdicciones con un peso relativo mayor que el promedio, cuyo esfuerzo para llegar al objetivo del Pacto de Mayo debe ser mucho mayor. Habrá que ver qué lineamientos y qué discusiones van surgiendo en relación a esta cuestión en el ámbito del Consejo de Mayo.